Las torres gemelas fueron golpeadas dos veces

Durante este mismo mes de septiembre del presente año 2021 se ha cumplido el 20 Aniversario del atentado a las torres gemelas del Word Trade Center de Nueva York durante la mañana del 11 de septiembre de 2001. Se trata de una fecha histórica con la que se inicia oficialmente la Historia con mayúsculas del actual siglo XXI. Una fecha para recordar y sobre la cual reflexionar. Motivo por el cual escribimos y reproducimos este ensayo de historia para tod@s los lector@s de la revista cultural Atenea XXI en su tercera edición trimestral del mes de Septiembre de 2021. En este ensayo recordamos estos trágicos acontecimientos que tanto conmovieron a la opinión pública inter-nacional y cuyas consecuencias todavía se dejan sentir en la actualidad a 20 años vista de aquel histórico y trágico evento. Podríamos afirmar sin temor alguno a equivocarnos que la sombra del 11 de septiembre del año 2001 es alargada.

Todos tenemos grabadas en nuestra memoria colectiva las terribles imágenes de los atentados terroristas contra las torres gemelas del World Trade Center de Nueva York. Se trata de un hecho imborrable que ya forma parte de nuestra cultura retínica independientemente que nos guste recordarlo o no. Este trágico evento sucedió durante los inicios del primer mandato del entonces 43º presidente de los Estados Unidos de América George Walker Bush. Cargo que ejerció desde el 20 de enero de 2001 hasta el 20 de enero de 2009. Anteriormente, había sido el 46.º gobernador del estado de Texas desde el 17 de enero de 1995 hasta el 21 de diciembre de 2000. Este presidente tenía menos luces que un carro de feria y mentía más que hablaba. Pero resultó muy util para los intereses de los poderosos lobbies económicos y financieros de EE.UU. a los que servía de forma consciente y eficaz. Estos atentados del 11 de septiembre de 2001 le sirvieron de pretexto para invadir Afganistán y para provocar la segunda Guerra del Golfo invadiendo Irak y derrocando a su dictador Sadam Husein (1937-2006) bajo el falso pretexto de encontrar unas supuestas armas de destrucción masiva. Tal como todo el mundo ya sabe, tras la ocupación de Irak por parte de las tropas estadounidenses se hicieron varias prospecciones en territorio iraquí pero jamás se llegó a encontrar ningun arma de destrucción masiva que justificase la intervención militar de EE.UU. Con lo cual quedó en evidencia el Gobierno americano del presidente George Bush Junior tras mentir descaradamente al Congreso USA, a la Prensa, al pueblo norteamericano y a todo el mundo en general.

El 11 de septiembre de 2001, el atentado terrorista contra las Torres Gemelas de Nueva York, con casi 3.000 muertos, cambió el mundo para siempre. A 20 años de este trágico evento, los testimonios y detalles siguen causando impacto. Este mes de septiembre de 2021 se conmemora el 20 aniversario de los atentadoa terroristas contra las Torres Gemelas del World Trade Center de Nueva York. Actos terroristas perpetrados el 11 de septiembre de 2001. Estados Unidos recuerda ese día y a través de diversas ceremonias públicas honra a las casi 3.000 víctimas en un ambiente ensombrecido por la pandemia del coronavirus.

El 11-S de 2001, 19 terroristas miembros de la organización islámica Al-Qaeda secuestraron cuatro aviones comerciales, y lograron hacer impactar tres en sus objeti-vos: dos en las Torres Gemelas de Nueva York y uno en el Pentágono. El tercero se estrelló a campo abierto cerca de Washington D. C. Los ataques acabaron con la vida de 2.997 personas. A raíz de esa masacre, la política y la sociedad cambiaron para siempre, no solo en EE. UU., sino en todo el mundo. La lucha contra el terroris-mo, el desarrollo tecnológico y la vigilancia de los ciudadanos tomaron una dimensión y un rumbo que nadie hubo previsto antes de los ataques del 11 de septiembre. En este aspecto podemos decir que la verdadera historia mundial del siglo XXI empezó a sangre y fuego con esta fecha histórica que permanecerá inborrable en la memoria colectiva internacional.

En esencia el 11 de Septiembre de 2001 supuso que el mundo dejó de ser el mismo cuando Afganistán se mostró ante él de una manera brutal y trágica. Los diecinueve terroristas suicidas que secuestraron cuatro aviones, y luego se lanzaron contra las Torres Gemelas del World Trade Center, en Nueva York, y contra el Pentágono, en Washington, pertenecían a la organización Al Qaeda, dirigida por Osama Bin Laden. El objetivo de los terroristas islámicos consistió en golpear tres cosas: el mundo heredero de la guerra fría, el punto neurálgico de la globalización y los supuestos esfuerzos por hacer de la tierra un lugar más seguro y mejor. Minutos después del trágico suceso, las personas de todo el mundo se dispusieron a conseguir un televisor que asegurara la mejor imagen y perspectiva sobre atentado una y otra vez. El estado general emocional era de estupor, asombro e incredulidad. Dentro de ese contexto, y en los albores de un nuevo milenio, pronto los casos de pánico y miedo, asociados a ideas místicas se propagaron por doquier tanto dentro como fuera de los Estados Unidos.

Un artículo del New York Times titulado “For Fear of Flying, Therapy takes to the skies”, confirmó que la fobia a los aviones luego del 11 de Septiembre cambió de forma sutil, con encuestas llevadas a cabos inmediatamente después del evento, mostraron un pico de casos con pánico o fobia a viajar en aviób. Pero ¿como definir un acto “terrorista? Según definiciones sobre lo que se considera “terrorismo” tenemos que, “el ilegitimo uso de la fuerza o la violencia contra personas o propiedades para intimidar y coaccionar al Gobierno, a la población civil, o cualquier segmento en fomento de cualquier objetivo social”. En este contexto, el siguiente artículo pretende ser una síntesis útil para futuros abordajes, tanto de los trabajos en un nivel macro como micro-sociológico con respecto a las causas y consecuencias del 11 de Septiembre que ayude a los investigadores a comprender el fenómeno de forma integral. Si bien el código ético mundial para el turismo se refiere al tema de la protección, seguridad y estado indefensión del turista, no todo riesgo tiene la posibilidad de ser evadido; en ocasiones, es el mismo riesgo el que atrae como en el caso de los deportes extremos.

A la hora de tratar de establecer los hechos nos encontgramos con que la literatura existente sobre el tema se encuentra altamente fragmentada tanto disciplinar como conceptualmente. Existen numerosos errores metodológicos y teóricos serios en relación a una confusión entre riesgo, temor y pánico como también los verdaderos alcances materiales y psicológicos de tal evento. Motivo por el cual resulta del todo necesario el hecho de tratar de analizar filosóficamente las raíces del temor, la inseguridad y el riesgo. Asimismo también tenemos la inexcusable obligación de revisar minuciosamente los trabajos previos en materia de seguridad turística y elección de destinos así como también tratar de evaluar las causas y consecuencias del ataque al WTC de la ciudad de Nueva York. Debemos centrar nuestro interés en proveer a la opinión pública internacional una información lo más precisa y concreta que sea posible sobre este tema que permita ser usado en aproximaciones de carácter empírico. La prioridad absoluta consiste en comprender que pasó durante aquel 11 de Septiembre de 2001 en la gran Manzana de Nueva York ahora hace ya veinte años.

Durante la trágica mañana del 11 de septiembre de 2001, hace ahora 20 años, un terremoto cambió el mundo y nos metió de lleno en el siglo XXI. Cuatro atentados simultáneos en Nueva York, Washington y Pensilvania dejaron casi 3.000 muertos y 6.000 heridos, durante el peor ataque sufrido por Estados Unidos en suelo propio. El responsable de tamaña tragedia fue el grupo terrorista islamista Al Qaeda. Sus miembros que participaron en el atentado terrorista utilizaron cuatro aviones comerciales como proyectiles para cometer un gigantesco y espectacular atentado múltiple. Dicho atentado tuvo como objetivo atacar los símbolos estadounidenses: el World Trade Center, el Pentágono y el Capitolio. El mundo entero vió con horror presenciando en directo la caída de las Torres Gemelas En cuanto a su instigador Osama Bin Laden se convirtió en el enemigo público número uno del planeta Tierra. Muchas cosas cambiaron a partir del 11-S de 2001. Sólo una semanas después el ejército de EE.UU. bombardeó Afganistán con el claro objetivo de derrotar al régimen talibán. Como respuesta a tal invasión, el terrorismo yihadista se convirtió en un fenómeno global y animó a otras células islamistas a actuar de manera indiscriminada contra objetivos occidentales. La vigilancia en el acceso al transporte aéreo cambió de manera drástica y se abrió un debate que está marcando en buena medida el primer cuarto de este siglo, entre libertad y seguridad. Ni que decir tiene que tanto el atentado del 11 de septiembre de 2001 en Nueva York como los posteriores atentados de origen islamista en Madrid, Londres y Paris trageron como consecuencia inevitable un sustancial recorte de libertades tanto públicas como privadas.

Así como también la inevitable censura y el filtro a los medios de comunicación y una mayor y agobiante vigilancia orwelliana. Los sucesos del 11 de septiembre del año 2011 le han servido de coartada a un sistema corrupto y perverso para justificar toda una serie de recortes de libertades, conculcación de derechos humanos y un mayor control y vigilancia privada y colectiva sobre la mayoría de los ciudadanos. Los poderes beneficiarios de esta situación han demostrado ser unos fieles discípulos y aplicadores de los conceptos e ideas políticas expresadas en la célebre novela “1984” del escritor en lengua inglesa George Orwell (1903-50). Ellos saben mejor que nadie que en la guerra contra el terrorismo internacional de tipo islamista lo importante no es ganar esa guerra sino mantenerla en activa durante mucho tiempo y hacerla visible a través de la Prensa y los medios de comunicación de masas (“Mass Media”) que ellos controlan y manipulan. Con ello consiguen llevar a cabo con éxito sus oscuros propósitos de control, manipulación y engaño colectivo, censura cultural e informativa y recorte de libertades fundamentales. Toda esa situación orwelliana se ha visto agravada 20 años más tarde gracias a la Pandemia del Coronavirus (Covid 19) que incluso cumple mejor con estos objetivos. Así están las cosas en este mes de septiembre del actual año 2021 cuando se cumple el 20º Aniversario de los atentados terroristas de Al Qaeda contra las torres gemelas del Worl Trade Center de Nueva York. Unas gigantescas torres gemelas que fueron golpeadas dos veces por sendos aviones comerciales pilotados por varios miembros de la organización terrorista islamista Al Qaeda ace ahora exactamente veinte años.

Sobre l'autor

Deixa un comentari

L'adreça electrònica no es publicarà. Els camps necessaris estan marcats amb *

Index